Leído en: 2012, antiguamente.
Escritor: VV.AA.
Género: Terror.
Año de publicación: 1970.
Sinopsis: Corresponde a Howard Phillips Lovecraft (1890- 1937) el papel más importante en la invención de los «Mitos de Cthulhu», ciclo de narraciones de horror cósmico ambientadas en viejos mundos de caos y espanto. Suyo fue el descubrimiento del «cuento materialista de terror», en el que las claves mágicas dejan paso a fórmulas de geometría no euclidiana, extraños híbridos prehumanos ocupan el lugar de los demonios y confusas manifestaciones reguladas por leyes cósmicas desconocidas desplazan a los fantasmas del relato de horror clásico. Sin embargo, como señala Rafael Llopis, prologuista y antólogo del volumen, esta fantástica cosmogonía no solo remite a notables precedentes (Lord Dunsany, Ambrose Bierce, Robert W. Chambers, Arthur Machen o Algernon Blackwood), sino que también fue enriquecida por otros escritores.
~~~
Libro mítico (je) de mi juventud con el que descubrí a
Lovecraft. Tiene una introducción a los Mitos y a cada grupo de relatos bastante extensa y muy interesante. Algunos me han gustado un poco más y otros un poco menos al volver a leerlo, pero no he cambiado demasiado de opinión. Destacan los de ya sabemos quién y los de dos o tres escritores más (entre estos, «Las ratas del cementerio», el que más me ha impresionado), y también hay otros regularcillos. Si bien no es perfecto, está entre mis libros preferidos y creo que se le puede considerar esencial en la literatura de terror traducida al castellano.
~~~
[No sigas si no has leído el libro:
a partir de aquí desvelo el argumento]
~~~
«Días de ocio en el país de Yann», de Lord Dunsany - 6. Algo lento y no muy evocador, aunque hubo ocasiones (incluido el final) donde sí lo fue. Me ha gustado, y bastante más de lo que esperaba por el recuerdo que tenía de él, pero me da que las fantasías oníricas no son lo mío.
«Un habitante de Carcosa», de Ambrose Bierce - 7. Bueno y también cortito. Hoy en día muy previsible, eso sí.
«El signo amarillo», de Robert W. Chambers - 7. Otro destacable, sobre todo la última parte. Al no contar todo sobre el libro ese ni su relación con el vigilante de la iglesia ni con los sueños, gana en intriga... y a la vez parece que queda algo cojo.
«Vinum Sabbati», de Arthur Machen - 6. Bien escrito y ameno, sin embargo tiene varios detalles desconcertantes (como por ejemplo que el médico no dijera nada cuando al final le cuenta a la chica en la carta que su hermano le había hablado de la situación al principio).
«El Wendigo», de Algernon Blackwood - 8. Un poco largo pero absorbente. No era de mis favoritos y en la relectura se ha metido en el grupo; el mejor del libro hasta ahora.
«La maldición que cayó sobre Sarnath», de H.P. Lovecraft - 8. Una historia sencilla bien contada. La primera de Lovecraft y la que más me ha gustado de momento, a pesar de cosas como la referencia a esos rubitos de ojos azules del final…
«El ceremonial», de H.P. Lovecraft - 8. Otra notable de Lovecraft y la primera del libro perteneciente a los Mitos propiamente dichos. Excelente final, con cita del Necronomicón incluida.
«Los perros de Tíndalos», de Frank Belknap Long - 8. Tiene algunas incongruencias porque se escribió hace mucho tiempo (lo de los enzimas, por ejemplo) y el estilo es corriente. No obstante, el relato es bueno; deja huella.
«La sombra sobre Innsmouth», de H.P. Lovecraft - 9. Uno típico de Lovecraft de los que me fascinan. Quizás una pizca demasiado largo, con explicaciones innecesarias de vez en cuando y lleno de adjetivos describiendo lo horrible que es todo; pero da igual, porque es original, creíble, interesante y tiene una atmósfera perfecta.
«La piedra negra», de Robert E. Howard - 6. Un cuento normalito. No llega a crear sensación de inquietud porque puedan quedar monstruos de otras épocas por ahí, por lo menos hoy en día.
«Estirpe de la cripta», de Clark Ashton Smith - 6. No está mal. La trama es simple y el estilo me agrada, aunque es de esas con muchas casualidades y las relaciones entre sus personajes serían normales cuando se escribió; hoy resultan más bien extrañas.
«En la noche de los tiempos», de H.P. Lovecraft - 8. Otro de Lovecraft y otro que me encanta. Lo de siempre en lo «malo»: algo largo y le sobran aclaraciones. Aun así, el caso es que tampoco queda mal todo eso, y menos teniendo en cuenta el argumento, el ambiente, las sensaciones… Ha resistido peor el paso del tiempo comparado con otros suyos, en especial la parte que podría considerarse de ciencia-ficción, pero me sigue gustando como antiguamente.
«Reliquia de un mundo olvidado», de Hazel Heald - 4. La historia no está mal, pero la estropean las explicaciones innecesarias (y abundantísimas) y unas cuantas incoherencias, como que el protagonista, asegurándose escéptico de la leyenda sobre la impresión en la retina de la última imagen vista en vida, mire los ojos de la momia y, luego, después de tantas cosas raras, no pruebe a poner el pergamino en las momias para ver si «despiertan» porque no quería apoyar «semejantes teorías supersticiosas»… habiendo él mismo comentado anteriormente que cuando estuvieron con la momia y los dos muertos sintieron rigidez y se les pasó al inspeccionar los pergaminos (eso es tener espíritu científico, sí señor); claro, es mejor hacer una autopsia de la momia para tener un final chachipiruli con susto incluido. El peor relato del libro con diferencia hasta el momento (o no estaba yo de humor).
«Las ratas del cementerio», de Henry Kuttner - 9. No es de Lovecraft y es buenísimo. Un cuento de terror de verdad, realmente angustioso.
«El vampiro estelar», de Robert Bloch - 5. No es nada del otro mundo y sirve como ejemplo del juego de meter a un escritor como protagonista, en este caso a Lovecraft, quien escribiría una continuación (la siguiente en la recopilación) y Bloch a su vez otra a la suya («La sombra que huyó del chapitel», también incluida en este volumen).
«El morador de las tinieblas», de H.P. Lovecraft - 7. Lovecraft le devuelve la jugada a Bloch y le hace aparecer en cuento mucho más elaborado que el del otro escritor. El final se ve venir pero está muy bien relatado, usando las notas que toma el protagonista mientras espera el desenlace.
«La hoya de las brujas», de H.P. Lovecraft y A. Derleth - 4. Además de esbozar su idea de Dioses Arquetípicos (los buenos) contra Primordiales (los malos), el Derleth este escribe un relato de los Mitos (según dicen, a partir de uno sin terminar de Lovecraft o de una idea suya) que parece una secuela de «El Exorcista». No me gustó hace años y sigue sin gustarme ahora.
«El sello de R´lyeh», de August Derleth - 4. No me atraen sus cuentos en absoluto, por mucho que fuera muy amigo de Lovecraft y gracias a él se conserven las narraciones del de Providence. Una historia de Cthulhu que no provoca la más mínima inquietud y en la que además el tío se dedica a la taxonomía de dioses y monstruos que tanto le interesa. No es horrible, pero reducir los Mitos a la típica lucha entre el Bien y el Mal les quita toda la gracia, hombre.
«La sombra que huyó del chapitel», de Robert Bloch - 6. No está mal. Más «de detectives» que de terror, es un homenaje a Lovecraft (como la anterior de Derleth) y continúa la trama de «El morador de las tinieblas» haciendo un alegato contra las armas atómicas.
«La iglesia de High Street», de Ramsey Campbell - 6. Interesante. Aunque no llega al horror de Lovecraft, la historia está bien, con toques modernos y todo.
«Con la técnica de Lovecraft», de Juan Perucho - 5. Medio poético, un cuento extraño que no me dice mucho.