Visión ciega



  • Leído en: 2010.
  • Título original: Blindsight.
  • Escritor: Peter Watts.
  • Género: Ciencia ficción.
  • Año de publicación: 2006.
  • Sinopsis: El 13 de febrero de 2082, más de 65 000 sondas de origen desconocido aparecieron alrededor de la Tierra dispuestas en una red esférica para cubrir toda la superficie del planeta. Con un destello simultáneo, se desintegraron en la atmósfera... y enviaron una señal al espacio. Alguien acababa de hacernos una foto. Un equipo formado por exobiólogos y especialistas en comunicación es enviado en la astronave Teseo tras la pista de la señal emitida por las sondas extraterrestres. Tras años en animación suspendida, la tripulación es despertada por los sistemas automáticos de a bordo más allá de los límites del sistema solar, en los helados páramos del Oort. Allí tendrá lugar la más escalofriante experiencia de primer contacto que jamás pudieron imaginar. Una experiencia que cambiará para siempre sus ideas sobre el ser humano y su papel en el universo... si consiguen sobrevivir el tiempo suficiente.


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    Una hard space opera psicológica, podría decirse, con una trama atractiva y personajes estrambóticos. No me ha disgustado ni se me ha hecho larga, y tiene especulaciones científicas y filosóficas curiosas. Lo que me ha dado problemas es el envoltorio: el libro es confuso (mucha jerga especializada y un estilo opaco y fragmentado) y me han parecido gratuitos, aunque también interesantes, muchos inventos tecnológicos y las peculiaridades de los protagonistas, y caprichosos el motivo de la elección de la tripulación y algunas de sus acciones. Debido a esto, y a la falta de diversión y el exceso de seriedad, nunca me he podido sumergir en el relato totalmente. Como novela «de ideas» puede ser satisfactoria, y sus extrañezas le dan un aire original, pero queda lastrada por esos detalles.


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    [No sigas si no has leído el libro:
    a partir de aquí desvelo el argumento]

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    Las reflexiones sobre la consciencia humana tienen su miga (si bien no comparto sus conclusiones) y planteadas de otra forma posiblemente me habrían gustado más; tal y como están expuestas, he pasado por encima y he soltado un «vale» a cada afirmación de los personajes sin creérmelo del todo y buscando otra cosa que me atrapase. Tratar la dificultad de comunicarse entre humanos poniendo alienígenas como excusa es igualmente atrayente, si bien lo hizo mejor Lem sin dar la impresión de estar en una clase (hasta hay un apéndice al final para profundizar en la materia... y no viene mal para los interesados). Los extraterrestres están conseguidos, eso sí: superan en rareza a los tripulantes enviados desde la Tierra... y ya es decir, porque lo de los vampiros me chirría un poco y el resto también se las trae.

    Y para terminar: ¿A qué viene el ataque del vampiro al protagonista? ¿Por qué es tan importante que deje de ser un observador sin sentimientos y se «vuelva» humano? No lo entendí ni releyendo la parte final; como tampoco entendí desde el principio que deba ir el sinteticista a dar fe de lo que ocurre allí (lo acepté y seguí leyendo) ni muchas otras cosas incoherentes a mi modo de ver. Una relectura atenta quizá me hiciera ver la luz; sin embargo, igual no merece la pena, y no siento la necesidad de hacerlo pronto...