Casa de hojas
~~~
Este experimento literario me ha recordado al cinematográfico de La bruja de Blair, y lo he leído con rapidez, atención y, a ratos, cansancio. No todos los trucos funcionan y la profundidad es quizá algo escasa para convertir tanta página en una verdadera obra de arte, pero la estructura acompaña muy bien a esa historia oscura y alucinada, y su originalidad de segunda mano la potencia para hacer de ella un entretenimiento curioso y trabajado al que por fin, reedición con colores remasterizados (sic) mediante, he podido echar un ojo. Y he disfrutado de los artilugios, los homenajes, las tramas, la tensión cuando la había y esa perseguida ambigüedad que, por suerte, no resulta impostada. Y al mismo tiempo he echado en falta una sustancia que podría haberla colocado entre mis lecturas favoritas, aunque tal vez fuera una proeza solo al alcance de un China Miéville o una Le Guin más dada al artificio.